+ Que me sé lo de sus
cicatrices.y el sitio que le tienes que tocar en el este de su pie izquierdo
para conseguir que se ría. Que yo también he memorizado su número de teléfono,
pero también el numero de sus escalones.
Que no sabes lo que es caer desde un precipicio y que el te diga: venga hazte un piti y me lo cuentas |
Que no sólo conozco su última pesadilla,
también las mil anteriores, y yo sí que no tengo cojones a decirle que no a
nada. No sabes que es que te abrace y luego no sepas cómo deshacerte de todo el
mundo. Que razones tenemos todas, pero yo, muchas más que vosotras.